domingo, 5 de septiembre de 2010

El poder del odio

Llevo cierto tiempo planeando un post, entre historias de calzoncillos, escritos melodramáticos y otras gilipollces varias, he estado pensando un buen post. Primero pensé comentar una peli romántica argentina de los noventa que vi el otro día, pero como el curso está cercano y no quiero acabar marginado, pasé de crear el post. Luego pensé en un post basado en esas joyas que fueron los dibujos animados de los noventa, así que invertí el sábado por la noche a hacerlo: me dí cuenta de que eso era una soberena gilipollez, el post no tenía coherencia y que además ayer fue sábado, y el sábado por la noche no se me ocurrió nada mejor que hacer ese post, por lo que tengo que darle un ambio serio a mi vida.
Luego se me ocurrió criticar a Crepúsculo, esa estúpida obra de vampiros que se enamoran, y que ha sido plagiada mil veces, y es imposible entrar una puta página web sin que te asalten banners de "Tu nombre en vampiro" o "Lucha final entre hombres lobo y vampiros" (ni porno se puede ver tranquilo).
El único problema real que tengo con Crepúsclo es que no la he vist, no he leído el libro, ni tengo intención de hacerlo.
A ver, respecto al libro, no voy a pagar 20 eurazos por semejante bazofia, no aguanto las historias de amor (excepto la peli argentina...), y ninguno de mis amigos es sodomita, por lo que descarto que lo tengan. ¿Amigas? Si tuviese amigas no estaría el sábado por la noche haciendo un post sobre dibujos animados de los "90, os lo aseguro. Además, llevo un verano impecable: he leido a Vassily Grossman, a Hemingway y estoy leyendo a Tolstoi; sería destrozar una racha muy bonita.
¿Ver la peli? Me daría vergüenza alquilarla, es el único videoclub del barrio y entre esas cuatro paredes me estoy forjando una reputación (solo he alquilado pelis de zombies y cine independiente, tampoco es que esté muy acá). ¿Internet? Yo uso el blue ray de la Play3, y no admite las copias piratas, y verla en Megavídeo en mi portátil tirado en la cama no es muy halagueño. Quizás me decante por esa opción, o esperar a que la pasen por la tele (Wow, echan un documental sobre el apareamiento de la cucaracha en la 2, o puedo ver Intereconomía...dilema moral entre estos tres prodcutos) por lo que pienso que criticar una película que no me visto no sería ético. No obstantem tanto hype tampoco es ético.
Ahora pienso ¿qué diferencia hay entre los frikis que han visto The Clone Wars y las quinceañeras dedo-pasa que ven Crepúsculo? Ambos ven la misma mierda (The Clone Wars es mierda pura, señores). Ninguna, solamente que la quinceañera estúpida se pasará a otro subproducto que tenga unos abdominales de chocolate (en tableta, los bombones no atraen a las mozas) y sea un rebelde injustificado, y el friki seguirá viendo The Colne Wars, las seis pelis de la saga (de las que para mi solamente existe la trilogía orginal) y sabrá la diferencia entre un AT-AT, un AT-ST y un AT-AA y porqué los midiclorianos han sido la mayor patada argumental que le ha dado Lucas a su maltratada saga. Y que ellas no son consideradas frikis socialmente.
Bueno, ahora direis: ¿porqué odias tanto Crepúsulo, si no las has visto ni sabes de qué va? ¿Igual que ellas y algunos ellos siguen como zombies descerebrados a Edward y su palabra es ley, tú no te conviertes en un hype por odiar algo que no has visto?
Ese es el misterioso poder del odiado. He odiado dos o tres cosas en mi vida sin verlas: Crepúsculo, Física o Química (¿Porqué no Lengua o Literatura?) y en un acto de misantropía a un tipo que no he llegado a conocer. Con el amor, ese extraño sentimiento, no pasa lo mismo. A no ser que algún capullo me venga con lo del flechazo (Si crees en Cupido, ¿porqué no crees en el Ratoncito Pérez y los Reyes
Magos; además, vas al infierno por pagano y creer en otros dioses).
El odio es, por lo tanto, un sentimiento un tanto extraño, que conviene moderar, particularmente cerca de armas de fuego, armas blancas y cerca mía.
Acabo el post con un consejo para las fans de Crepúsculo: si quereis encontrar al amor de vuestra vida en un ser incomprendido y blancuzco, mirad en el fondo de vuestra clase, donde se encuntre un friki torturado por algún cani.
Si no, ligad como cualquier adolescente que se precie: hasta las trancas de whisky barato en un botellón.

3 comentarios:

Unknown dijo...

Oh..., me has impresionado con este comentario. Me encanta la capacidad que tienes de llevar un tema general al sentimiento de "odio"...

Pienso que muchas veces es inevitable que odiemos sin conocer (conste que no lo justifico...), pero muchas veces los prejuicios, o la opinión de tan sólo una parte vencen a la razón... Somos humanos y es difícil de evitar....

Francisco dijo...

¿Un tema general?

Unknown dijo...

Me refiero que has pasado del "odio a crepúsculo" al "odio" ^^